29 enero, 2014

Resumen de la segunda jornada del Workshop 2014: innovación y prospectiva energética

La segunda jornada del Workshop anual de Economics for Energy, celebrado la pasada semana en la sede madrileña de la Fundación Areces, versó sobre la innovación y prospectiva energética a largo plazo. En esta entrada, al igual que en la anterior, informaremos sobre el transcurso de la jornada, resumiendo las principales conclusiones.

El bloque correspondiente a la innovación energética consistió en primer lugar en la presentación de Antoine Dechezlepretre, research fellow en el Grantham Research Institute on Climate Change and Environemnt, de la London School of Economics. Bajo el título "Las políticas climáticas, Innovación y Crecimiento", Dechezlepretre presentó los resultados de tres interesantes trabajos que está llevando a cabo. La primera de las preguntas que plantea trata de saber si los mecanismos de precios de carbono inducen innovación. A partir de datos sobre patentes obtenidos de la European Patent Office (EPO) y utilizando técnicas de matching, confirman que el EU-ETS ha inducido la innovación en tecnologías de bajas emisiones de carbono. A continuación, se pregunta si esto es suficiente ya que afirma que hay otros muchos fallos de mercado que deben ser tratados. En particular el investigador se centra en dos: path dependence y knowledge spillovers. En base a sus análisis, afirma que existen evidencias de la existencia de path dependency, ya que aquellas compañías que en el pasado han desarrollado innovación en tecnologías de bajas emisiones en carbono, tienen más probabilidad de seguir haciéndolo. Esta dependencia también puede tener que ver con la localización geográfica. Por el otro lado, utilizando datos sobre patentes citadas, concluyen que las tecnologías limpias crean mayores knowledge spillovers que las sucias, que están por debajo de la media. En base a estos resultados, Dechezlepretre concluye que las políticas de precios, aunque funcionan, no son suficientes debido a la existencia de fallos de mercado, y por lo tanto se necesita intervención pública. 
A continuación Diego Díaz, responsable de Iberdrola Ventures-Perseo, presentó “Un modelo de innovación abierto en el sector energético”. La charla comenzó con la presentación de la compañía, líder mundial en la instalación de energía eólica, para después centrarse en la innovación. La innovación no sólo se refiere a productos y servicios, los dos aspectos básicos que deben estar detrás de toda definición de innovación son: valor (para los clientes) y resultados sostenibles (para la empresa). La unidad de negocio de Iberdrola es el KWh. La innovación en este producto llega a partir de dos fuentes: mejorar la eficiencia en los procesos existentes e innovar en el modelo. La segunda se implementa a través de innovación con socios tecnológicos (modelo abierto) y con las unidades de negocio (modelo descentralizado). Díaz cerró su ponencia presentando el programa PERSEO, que se centra en tres líneas de actuación: recursos energéticos distribuidos (DER), energías renovables y tecnologías para O&M.
En la siguiente y última sesión del workshop, sobre prospectiva energética a largo plazo, intervinieron Antonio Soria y Arnulf Grubler. Soria, del IPTS presentó el Marco para el clima y la energía 2030 recientemente publicado por la Comisión Europea y que tiene como objetivo lograr una reducción sustancial de las emisiones. Concretamente, la propuesta tiene un objetivo vinculante e incondicional de una reducción del 40% en las emisiones domésticas de GEI. Asimismo, el objetivo de renovables en la UE pasa a ser del 27% en 2030, y está previsto revisar la Directiva de eficiencia energética. Para lograr estos objetivos serán necesarias una serie de condiciones: transformación de la infraestructura energética de la UE, necesidad de competencia no distorsionada; imposición de reglas de ayudas de estado; mayor flexibilidad de los Estados miembros para fijar objetivos nacionales de renovables; revisión del EU ETS y un marco de gobernanza europea más fuerte. Básicamente replicar la estructura de la políticas económicas de la UE en la política energética.
El ponente expuso las medidas a tomar con respecto al EU ETS: reducción de emisiones en un 43% comparado con 2005; reforma sustancial para corregir los actuales desequilibrios del mercado e incrementar el factor de reducción lineal. En este sentido argumentó que mayores precios del carbono reducirán la necesidad de apoyo nacional a las renovables y son una señal para la inversión. Por otra parte, para los sectores no EU ETS se aplicaría: incremento del objetivo de reducción de emisiones del -10% al -30% en 2030 con respecto a 2005; transición a objetivos nacionales de GEI y mecanismos distributivos más equitativos. Todo esto teniendo en cuenta las preocupaciones de las industrias intensivas en energía con respecto a las fugas de carbono.
A continuación presentó una evaluación de los efectos de la reducción del -40% de las emisiones en la UE, tanto en solitario como acompañada de un acción internacional, en términos de PIB y de empleo, considerando distintas alternativas de reciclaje de ingresos, de fijación de un precio sobre el carbono y de subasta de los permisos ETS, así como la aplicación o no de impuestos sobre los sectores difusos.
La última intervención, a cargo del profesor Grubler, de IIASA, bajo el título de "Lecciones de históricas transiciones energéticas e implicaciones para los sistemas de innovación tecnológica en  energía", recordó la importancia de aprender del pasado. Así, si observamos la evolución pasada veremos que los cambios de sistemas energéticos suceden de una forma extremadamente lenta y que el ritmo del cambio depende de las características de cada tecnología. Por eso, recalcó que para que una política sea exitosa es necesario que estas sean implantadas de forma paciente y sistémica, ya que una promoción prematura a gran escala de una nueva tecnología tiene mayor riesgo. El desarrollo de la energía eólica que llevó a cabo Dinamarca, sería un ejemplo de cómo se debería hacer. Por otro lado, hasta el momento la mayor partida monetaria para cambiar el sistema energético se está destinando a la difusión, pero desde su punto de vista el foco de atención debería fijarse sobre las tecnologías que usan energía final y no sobre las de oferta, ya que las primeras, al ser mayores en número, ofrecen muchas más posibilidades de experimentación, lo que permite que la tecnología evolucione antes.
Un año más este workshop fomentó el debate entre los participantes, que desde distintos puntos de vista intervinieron realizando preguntas y dando opiniones sobre los temas tratados durante las dos jornadas. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios están sujetos a moderación. No se publicarán comentarios bajo el título de anónimo, pero sí con otro nombre.